jueves, 8 de octubre de 2015

... Y las ondas radiofónicas de COPE se emitieron desde la Casa Grande


Y así fue y así ocurrió gracias a un gran equipo dirigido por Margarita Mayoral, conducido por Marta Manix y ayudada por técnicos de sonido.
Hace ya varios meses que Doña Margarita Mayoral llegó a la Casa Grande, la descubrió y le impactó todo lo que vió, observó y compartió. Desde ese momento yo creo que tuvo claro que quería estar dentro para ser una de las voces que contara lo que en la Casa Grande se vive.
Y como todo lo que es importante y se quiere hacer bien... requiere un tiempo de reflexión y organización. Y así ha sido y por eso ha salido maravillosamente bien.
Hay personas que desde el momento de conocerlas no es que te caigan bien, es que crees en ellas, y por tanto, crees en lo que hacen y en como lo hacen. Margarita Mayoral es de esas mujeres que trabajan sin hacer ruido aunque dirija una emisora de radio, mira de frente y a los ojos, muy correcta y extremadamente educada. Las veces que he estado con ella se pueden contar con los dedos de una mano, pero siempre ha estado y ha sido igual: discreta, sincera, interioriza mucho las cosas y diría que es alguien disciplinada y con prioridades muy marcadas, por ese decálogo de vida por el cual cree entre otras cosas, en el servicio a los demás, en el compromiso con y hacia las personas.
Y así en silencio como a ella le gusta hacer las cosas, se fraguó este bonito y maravilloso programa. Hace unos días vino a vernos a la Casa Grande la periodista que dirige y presenta dicho programa, Marta Manix, una mujer muy joven pero con mucha fuerza, tanta como la gran voz que tiene. Era casi la primera vez que nos veíamos y me pareció muy profesional lo que hizo. Estuvo mucho tiempo en la Casa Grande, la conoció a fondo, se empapó de todo lo que vió, habló con los chicos y con los profesionales de esta Casa pero, sobre todo, les escuchó sus ideas, sus inquietudes y sus pensamientos. Así cuando salió de esta Casa lo llevaba todo más aprendido de lo que ella pensaba, a ella también le cautivó y le enganchó. Como buena periodista y estupenda comunicadora, sabe escuchar muy bien y además lo hace con la misma fuerza y profundidad que transmite su mirada.
Y con todos los preparativos ordenados llegó el momento de comenzar y sonó el Ave María cantado por David Mayoral junto con las notas de la guitarra de Fernando Martín. Después hablaron Javier el psicólogo, María la maestra y una de las responsables del teatro de la Casa Grande, Nacho Zazo que explicó lo que se hace en carpintería y también como trabaja él con los chicos a la hora de hacer deporte y ocio, Nati, la jefa de cocina, hablando de como se cocina y se come en esta Casa tan grande, no en vano se cocina a diario para 150 personas, comidas naturales y sanas dado que se utilizan todos los productos de nuestros invernaderos.
Después hablaron los protagonistas de verdad, los chicos y sus responsables o cuidadores: Luisfer y Sonsoles, que representaban a un colectivo muy numeroso, el más numeroso de todos, las personas que mejor conocen a los chicos, pues están todo el día en contacto con ellos, por eso son los profesionales de atención directa. Todas las profesiones requieren mucha responsabilidad, esta además está llena de luces y de sombras. Hay días muy complicados y otros de grandes satisfaciones y de todo ello son responsables los chicos, los nuestros, los que viven aquí.
Finalmente hablaron Luisa, Juan, Juana y Pepe, expusieron sus ideas, su forma de vida, sus deseos, sus miedos y hasta sus hobbies a través de la poesía y de los cuentos. ¡Lo hicieron estupendamente bien! ¡Bravo por vosotros chicos y por todos vuestros compañeros!
Después habló Don José Luis Retana sobre la figura de Don Bernardo Herráez y su relación con la Casa Grande. ¡Mira que hizo cosas importantes y trascendentales este señor, pero creo que la que más le llegó siempre al corazón fue la creación del Centro de Educación Especial Santa Teresa de Martiherrero!
Yo también hablé, pero lo mío fue una declaración de intenciones sobre lo que hacemos y un sincero agradecimiento a todos los profesionales que están en esta Institución.
Todos somos importantes en este gran puzzle que es la Casa Grande de Martiherrero y hoy, una emisora de radio, COPE Ávila, ha querido y ha conseguido demostrar a la sociedad abulense el lugar que le corresponde por derecho y por la experiencia que dan 50 años de compromiso y servicio a los demás.
Gracias COPE Ávila por tu reconocimiento y toda nuestra admiración a la ilusión y entusiasmo de Marta Manix y a la experiencia de Margarita Mayoral. Habéis hecho en 2015 lo que Don Bernardo Herráez hizo en 1965: estar cerca de los débiles para ayudar a que la sociedad les reconozca como ciudadanos de pleno derecho.
En nombre de todos, nuestro agradecimiento más sincero.